Como fotógrafos de arquitectura mexicanos somos parte de una comunidad que nos permite plasmar y documentar la evolución de los entornos urbanos alrededor de nuestro país. Sin embargo, sabemos que este tipo de fotografía es cada vez más requerida tanto por clientes como por fotógrafos que desean explorar más este mundo visual que no es exclusivamente para arquitectos. Cualquier buen fotógrafo puede aprender este estilo fotográfico.
Índice
Aspectos básicos para fotógrafos de arquitectura mexicanos e internacionales
Trataremos de partir con criterios técnicos expresivos, pues son los más adecuados para plasmar los diferentes espacios y estructuras arquitectónicas. Contar con conocimiento de la composición de los diversos estilos arquitectónicos es primordial. Esto será de gran ayuda al trabajar puntos prácticos basados en la técnica de la fotografía.
Por ejemplo, las funciones que tenga un edificio pueden influir en la manera de fotografiarlo. Mientras, en el interior de una iglesia o catedral es característico encontrar elevados arcos, bóvedas y todos los detalles artísticos que componen a este tipo de edificaciones. En consecuencia, se debe preparar un buen encuadre en este tipo de interiores.
En cuanto a los edificios contemporáneos muchos no identifican belleza en ellos, pero también cuentan con ella. Aquí los fotógrafos de arquitectura mexicanos deben enfocar su atención en las líneas, los materiales con que está construido, pues el color y texturas pueden generar un gran contraste con el paisaje urbano a su alrededor.
Por lo que llegamos al punto en que para captar edificios, la luz, la perspectiva y el color son factores de gran importancia. Si se puede resaltar la simetría de una obra, las líneas de la edificación, la imagen de un conjunto de casas es posible obtener una buena fotografía que se puede clasificar como arquitectónica.
De forma simple, para proceder a la captura de fotografías de arquitectura podemos hacer lo siguiente:
- Teniendo la cámara en mano identificamos un punto de vista que exprese la mejor estructura de la obra.
- Posteriormente la encuadramos de mejor forma con ayuda del trípode. Se decidirá entre el encuadre horizontal o vertical, la proporción del edificio ayuda a elegir esto.
- Aplicamos un enfoque automático
- Medimos la iluminación a través de la medición matricial
- Finalmente disparamos
Existen ciertos edificios que su particularidad se basa en su forma. En estos casos es más que recomendable retratar la obra a partir de que está peculiaridad de la edificación resalte dentro de la imagen. La clave en estos aspectos es emplear la luz de forma creativa.
La fotografía de arquitectura y la luz
Es sabido que la luz tiene dirección y calidad. En el caso de la dirección, ésta determina la colocación de la iluminación respecto al edificio. Un ejemplo se halla al tener un ángulo de 90 grados, aquí es una luz lateral. En cambio, si se ubica frente al objeto a fotografiar es una luz frontal, y si se está colocada detrás del sujeto y en dirección a la cámara es una la famosa iluminación a contraluz.
Calidad de la iluminación: define dureza o suavidad
Una luz dura se genera cuando la fuente de iluminación está al descubierto, es decir, no hay nada que se interponga entre ella y la edificación a fotografiar. En cambio, una luz suave se da cuando se utiliza un modificador de luz natural. Las nubes son un ejemplo, cuando se atraviesan entre el sol y la superficie, la luz solar pierde dureza.
Utilizar luz dura generará sombras más resaltadas, mientras la luz suave creará sombras difusas. Vista desde otra forma, la iluminación dura originará contrastes, en cambio de la suave, ésta ocasionará fotografías más planas al momento de ser capturadas, pero la información estará en las sombras que se producen.
Iluminación natural y artificial en la fotografía de arquitectura
La luz o iluminación puede derivar de fuentes naturales o artificiales, y ambos casos conlleva una serie de características que deben de conocer los fotógrafos de arquitectura mexicanos.
La iluminación natural es la proveniente del sol, y la cual se ve afectada tras su paso por la atmósfera terrestre. Cabe agregar, que la hora del día y la ubicación geográfica puede dar diferentes matices respecto a la intensidad, dirección, color y dureza. Por lo cual, una luz ideal para una fotografía podría tener un periodo corto de existencia durante el día a causa de la rotación del planeta.
Por ejemplo, si se llegase a requerir la iluminación de una puesta de sol, ésta puede tener corta duración y es necesario estar preparado cuando aparezca con el encuadre, velocidad de obturación y demás aspectos técnicos. Además, una ventaja de la luz natural, es que facilita tomar fotografías en exteriores y complementa a la iluminación artificial.
La iluminación artificial se origina de lámparas, flashes y otros objetos que emanan luz y son controlados por el fotógrafo. Aquí se tiene la ventaja de poder manipular la dirección, el color e intensidad. Sin embargo, emplear esta luz requiere mayor inversión en la producción y se necesitan de conocimientos técnicos para manipularla correctamente.
Contraluz
Se necesita eliminar la creencia acerca de que las mejores imágenes surgen a partir de capturar con la luz a espaldas del fotógrafo, pues las fotografías a contraluz pueden generar imágenes geniales. En estos casos el reto es hallar la exposición correcta. El exposímetro usualmente mide la iluminación frente a nosotros, deja al objeto a focalizar en sombras, casi como una silueta.
Requerimos una iluminación que llegue a la parte trasera de la edificación, y que sus rayos paralelos provoquen halos adecuados en su perímetro. Aquí algunos ejemplos que podrían tomar para ti los fotógrafos de arquitectura mexicanos.